`La Ciudad de Chocolate´
Vuela el tiempo, tan rápido como el halcón que persigue a su presa. Y esta, desconfiada, ingenua, sigue caminando sobre sus pasos bajo el sol, bajo la rapaz.
Se esfuma, como ese cachito de papel que se quemó una vez, esperando que aquel deseo se cumpliera, esperando que el humo lo llevara más allá. Haciéndole señales al artífice de sueños.
Siete notas, nada más, siete notas necesita el artífice para crear un sueño. Siete notas, que se esfuman con el viento.
Y hasta que ese nuevo sueño se cumpla, caminaré sobre mis pasos, caminaré bajo el sol, bajo la rapaz, en la senda del tiempo.
A veces, pensando que la rapaz me persigue. A veces, pensando que pude engañarla, y me perdió de vista.
Vuela el tiempo, tan rápido como el halcón que persigue a su presa. Y esta, desconfiada, ingenua, sigue caminando sobre sus pasos bajo el sol, bajo la rapaz.
Se esfuma, como ese cachito de papel que se quemó una vez, esperando que aquel deseo se cumpliera, esperando que el humo lo llevara más allá. Haciéndole señales al artífice de sueños.
Siete notas, nada más, siete notas necesita el artífice para crear un sueño. Siete notas, que se esfuman con el viento.
Y hasta que ese nuevo sueño se cumpla, caminaré sobre mis pasos, caminaré bajo el sol, bajo la rapaz, en la senda del tiempo.
A veces, pensando que la rapaz me persigue. A veces, pensando que pude engañarla, y me perdió de vista.